Reconocimiento facial

Reconocimiento facial

Esta dinámica ha sido una de las más divertidas que hemos hecho. Siguiendo con el taller de ciudadanía digital, el reto era pintarnos la cara o utilizar el pelo para engañar a la cámara y que no nos reconozca la cara. 

Estos fueron alguno de los resultados y del proceso: 

He de decir que parece más fácil de lo que en realidad es, ya que el reconocimiento facial se guía por la simetría y es complicado saber dónde debe pintarse para que la cámara no lo reconozca y hacer algo asimétrico. 

Además hay algunos dispositivos que captaban algunas caras y otros que no las reconocía. Algunos dispositivos ni siquiera tienen esta opción.

Hay que tener cuidado con esta medida de seguridad, ya que nos lo venden como para proteger datos de nuestros dispositivos y hemos visto que se puede engañar muy fácilmente, tan sólo con unas pinturas. 

Es por ello que nuestra privacidad está en peligro, aunque nos vendan cosas que a simple vista parece adecuado, es importante estudiar las diferentes opciones para realmente garantizar nuestra seguridad. Muchos de estos sistemas pasan de ser una seguridad a ser una amenaza, debemos saber controlar nuestros datos, ya que no sabemos lo que pueden hacer con ellos, pero lo que sí tenemos claro es que los utilizan para sacar beneficio propio. 

En conclusión me ha parecido, además de divertido, necesario este taller para darnos cuenta de que no todo lo que nos venden como seguro lo es y para utilizar de forma más consiente la tecnología y reflexionar qué hacer con nuestros datos personales.